Lo Maravilloso y Simple de la Vida que Disfrutaremos Después del COVID-19
Mientras emergemos poco a poco de la soledad y la nostalgia, comienzan a invadirnos los recuerdos y la gente que nos importa.
Nuestra mente vuelve una y otra vez a la vida que estábamos acostumbrados a vivir. Y sin importar lo difícil que nos haya tocado, o qué tan imperfectas hayan sido nuestras vidas, es inevitable pensar que antes era un momento menos complicado.
Hemos estado viviendo rápido, muchas veces olvidándonos de vivir como tal, ocupándonos del trabajo, nuestras obligaciones y compromisos sociales, con miles de cosas que exigen nuestro tiempo y atención. Apresurando la vida y haciendo la mayor cantidad de cosas en el menor tiempo posible.
Saludamos al vecino, a un compañero de trabajo, incluso a un amigo con prisa y pasamos de inmediato a lo siguiente que está en la agenda. Siempre estamos distraídos con nuestro día a día, siempre hay otra cosa importante que falta por hacer.
Pero hemos sido forzados a hacer una pausa y a cambiar la forma de pensar. Ahora, la línea entre lo constante y lo efímero se ha vuelto difusa. Hay tanto que hemos dado por sentado. Es en este momento cuando nos vemos obligados a mirarnos al espejo y reconocer la imagen de quiénes somos realmente.
Es entonces cuando se produce una sensación rara que persiste: te das cuenta de las cosas que extrañas cuando tienes el tiempo para estar contigo mismo.
Más allá de la fantasía de imaginar lo que está por venir, existe la realidad de encontrarnos en una etapa nueva y diferente de la vida. Pero con esa realidad viene el regalo de la alegría y el descubrimiento.
Y es que ahora se nos presenta una gran oportunidad ante nosotros: revivir la belleza de la experiencia humana. Se nos ha abierto la puerta de algo ‘conocido desconocido’ para reavivar algunos de los placeres más hermosos y simples de la vida: un primer abrazo, tomar un café en una terraza, disfrutar del sol en el parque.
"Lo primero que quiero hacer es retomar el contacto con la naturaleza, especialmente disfrutar de los árboles, las flores y el mar; será casi como verlo por primera vez ", dice Laia Saez, diseñadora gráfica de PDPAOLA. Agrega que también quiere abrazar a su familia y amigos cercanos y hacer algo tan 'mundano' como comer con ellos.
Efectivamente, volver a la naturaleza le gana a cualquier pantalla, y los abrazos serán más deseados y necesarios que nunca. Volveremos a abrazar a nuestros amigos y familiares como si fuéramos los protagonistas de una película romántica.
Claudia Palatchi, directora de arte de PDPAOLA, comparte ese sentimiento. Ella también quiere volver a conectar con “la naturaleza y su esencia,” el cariño de sus amigos y darse un chapuzón en el mar.
Para Borja Padin, diseñador en PDPAOLA, se trata de poder viajar en avión nuevamente y mientras sueña con descubrir muchos nuevos lugares.
Por su parte, Jabel Riera, Director de E-commerce, desea pasar tiempo con su pareja, sin nada especial que hacer, simplemente estar juntos ya será el mayor regalo. “Será como volver a tener una primera cita”, explica Jabel.
De manera similar, Laura Díez, que maneja las redes sociales en PDPAOLA, quiere pasar tiempo con su chico, así como con sus abuelos y amigos, y "ver una puesta de sol desde una terraza".
Estamos volviendo a un mundo que será diferente, y nosotros también. Estamos teniendo un regreso al redescubrir la alegría de lo que se volvió mundano: desde un proyecto de trabajo que retomamos con un aire renovado hasta redescubrir los "primeros" sentimientos de estar con alguien que amamos.
Lo que está por venir puede ser mejor porque hemos aprendido a tener más paciencia y hemos ganado sabiduría. Ahora tenemos mayor aprecio y sentimos más amor; nunca más nos perderemos las cosas más maravillosas y simples que puede ofrecer la vida.
